¿En qué consisten?
Un mecanismo de defensa es una estrategia psicológica inconsciente que las personas utilizan para hacer frente a situaciones incómodas y difíciles.
Estos mecanismos pueden reducir la ansiedad, la tristeza y / o la ira de una persona y mantener su propia imagen.
Todos los Eneatipos del Eneagrama a veces usan diferentes mecanismos de defensa en diferentes momentos.
Sin embargo, los mecanismos de defensa de los Enatipos están estrechamente relacionados con cada uno de ellos, y estas estrategias de afrontamiento basadas en ellos son más obvias cuando los individuos se enfrentan a problemas.
En términos del Eneagrama, comprender el mecanismo de defensa primario de cada eneatipo es una clave importante para desbloquear el control del ego sobre nosotros.
Ego:la forma de los 9 Eneatipos
Cuanto más fuerte sea la actitud defensiva -y, en particular, el mecanismo de defensa primario-, más activo será el ego en lo que respecta a la autodefensa.
Como resultado, si queremos permitir que el ego se muestre en una forma más pura para que podamos explorar, examinar y crecer reduciendo el control del ego sobre nosotros, encontramos que debajo de la defensa hay un tesoro de posibilidades inexploradas.
De hecho, podemos llegar a la conclusión de que esta defensa, algo que nos protegía desde el principio, ya no es necesaria o sólo lo es cuando decidimos recurrir a sus servicios.
Aquí la lista de los principales mecanismos de defensa por eneatipo, seguida de una explicación más profunda de cada uno:
- Uno: Formación de reacciones
- Dos: Represión
- Tres: Identificación
- Cuatro: Introyección
- Cinco: Aislamiento
- Seis: Proyección
- Siete: Racionalización
- Ocho: Negación
- Nueve: Narcotización
Mecanismos de defensa psicológicos de cada Eneatipo
Eneatipo Uno: Formación de la reacción
La formación de reacciones es un mecanismo de defensa mediante el cual las personas pueden reducir o intentar eliminar la ansiedad causada por pensamientos, sentimientos o comportamientos que consideran inaceptables y reaccionar de una manera completamente opuesta a la reacción real.
Los críticos activos internos del Uno determinan el contenido aceptable basado en la ética social, las expectativas contextuales y los principios morales.
Cuando el corazón interno experimenta una reacción que se considera “inaceptable”, la formación de reacciones se convierte en un remedio defensivo.
Un ejemplo sutil que se ve a menudo en las personas es que cuando no les agrada alguien, son muy amables y educados con esa persona.
Un ejemplo más flagrante (no exclusivo del Eneagrama) es un individuo que llevó a cabo una cruzada contra la corrupción empresarial y luego se descubrió que había malversado dinero de la organización.
Eneatipo Dos: Represión
La opresión es un mecanismo de defensa por el que los individuos se esconden información sobre sí mismos -por poner un ejemplo, sentimientos, deseos, aversiones, temores y necesidades- que son demasiado bastante difíciles de reconocer de manera consciente.
Sin embargo, la información reprimida no desaparece, sino la expresión de los datos reprimidos se controla o bien se retiene mientras que prosigue influyendo en el comportamiento del individuo.
Por ejemplo, los pequeños de un par de años pueden sentirse deseoso y precisar seguridad, mas pueden ser ligerísimamente siendo conscientes de ello.
En sitio de explorar estos sentimientos o bien buscar consuelo, el 2 calma a otra persona que semeja estar angustiada
Eneatipo Tres: Identificación
La identificación es un mecanismo de defensa sicológico en el que una persona incorpora de manera inconsciente atributos y peculiaridades de otra persona a su personalidad y sentido del .
La identificación es una forma de fortalecer la autoestima formando una coalición imaginaria o bien real con una persona admirada y adoptando sus peculiaridades.
Cuando los 3 modelan su comportamiento desde otra persona o bien de la idea que tienen de ella, no acostumbran a ser siendo conscientes de que lo hacen.
Por esta razón, les resulta complicado separar lo que verdaderamente son de esa imagen.
En particular, los 3 se identifican más con imágenes de individuos que son admirados en el contexto social deseado por los 3, y la imagen con la que se identifican los 3 acostumbra a mudar conforme cambia su contexto.
Eneatipo Cuatro: Introyección
La introyección es un mecanismo de defensa contraintuitivo.
En lugar de repeler la información crítica y las experiencias negativas que pueden causar ansiedad o dolor a una persona, los individuos introyectan la información, es decir, absorben, interiorizan e incorporan completamente estos datos a su sentido del yo.
Fritz Perls, el padre de la Terapia Gestalt, se refiere a este fenómeno como tragar algo entero sin poder diferenciar la información que es verdadera de la que no lo es.
Los cuatros introyectan información negativa -y repelen los datos positivos- sobre sí mismos como forma de hacer frente a la información dolorosa y neutralizar las amenazas externas.
Prefieren lidiar con el daño autoinfligido antes que tener que responder a las críticas o al rechazo de los demás.
Eneatipo Cinco: Aislamiento
El aislamiento se genera en los Cincos como una forma de eludir que se sientan apabullados y vacíos.
Los cincos se aíslan replegándose en su psique, aislándose de sus sentimientos y dividiendo, esto es, aislando cada parte de sí totalmente o bien de las partes relacionadas.
Por servirnos de un ejemplo, los cincos apartan sus pensamientos de sus sentimientos y/o los sentimientos de los comportamientos, como apartan su vida personal de la laboral.
Los cincos asimismo pueden aislarse de otras personas y separar sus relaciones a fin de que sus amigos jamás se conozcan; en verdad, ciertos cincos tienen aun vidas segregas.
Eneatipo Seis: Proyección
La proyección es un mecanismo de defensa psicológico en el que los individuos atribuyen de manera inconsciente a el resto sus pensamientos, emociones, motivaciones, atributos y/o comportamientos inadmisibles, no deseados o bien rechazados.
Si bien la proyección puede ser positiva, negativa o bien neutra, se genera por el hecho de que los individuos que proyectan perciben los atributos proyectados como bastante difíciles de reconocer o bien amenazantes para pensar en ellos mismos.
Como los Seises hacen estas atribuciones de manera inconsciente, se imaginan que son verdaderas, si bien en un nivel más profundo no están absolutamente seguros de ello.
Si bien los Seises emplean la proyección como una forma de crear cierta certidumbre y de esta manera reducir su ansiedad en situaciones equívocas, dudosas o bien potencialmente peligrosas, estas proyecciones -singularmente si son de naturaleza negativa- aumentan irónicamente el nivel de ansiedad del 6.
Además de esto, cuando los 6 proyectan algo negativo o bien positivo que no es cierto, crean una realidad falsa sin saber que lo hacen.
Eneatipo Siete: Racionalización
La racionalización es un mecanismo de defensa a través de el que los individuos explican pensamientos, sentimientos y comportamientos inadmisibles de una forma que evita o bien oculta por completo sus auténticas motivaciones, pretensiones o bien los efectos del comportamiento.
Cuando los sietes racionalizan, lo hacen a través de un reencuadre positivo, justificando su comportamiento explicándolo en términos enormemente positivos.
Los sietes emplean el reencuadre para eludir el dolor, el malestar, la tristeza, la culpa y la ansiedad, de esta forma para eludir aceptar la responsabilidad personal de lo ocurrido.
Eneatipo Ocho: Negación
La negación es un mecanismo de defensa a través de el que los individuos niegan de manera inconsciente algo que les hace sentir ansiedad, negando su existencia.
Puede incluir pensamientos, sentimientos, deseos, sensaciones, necesidades y otros factores externos que son inadmisibles para el 8 por alguna razón.
La negación adopta diferentes formas.
Una persona puede negar por completo la realidad de la información desapacible, aceptar que algo es cierto mas negar o bien disminuir al mínimo su gravedad, o bien aceptar que tanto la información como su gravedad son ciertas mas negar cualquier responsabilidad personal por esta razón.
Eneatipo Nueve: Narcotización
La narcotización es un mecanismo de defensa sicológico en el que los individuos se aduermen de manera inconsciente para eludir algo que les semeja demasiado grande, complejo, bastante difícil o bien incómodo de manejar.
Los 9 se narcotizan y se distraen efectuando actividades rítmicas prolongadas que les resultan familiares, que requieren poquísima atención y que les dan comodidad: por servirnos de un ejemplo, lavar los platos; trabajar en el jardín; leer de forma continua libros del mismo autor o bien del mismo género por placer; dar un camino a pie o bien en bicicleta; sostener conversaciones casuales usuales o bien prolongadas; o bien mudar de forma continua de canal en la T.V.
Los 9 asimismo usan las rutinas al día, como los rituales matinales o bien nocturnos, para inmunizarse de la conciencia plena, y se sienten agitados, irritados o bien desorientados cuando estas actividades repetitivas se interrumpen.
Origen de los mecanismos de defensa de los Enatipos
La idea de los mecanismos de defensa parece haberse originado con Sigmund Freud y ha formado parte de nuestra comprensión psicológica moderna desde su época.
Existen abundantes nombres para los mecanismos de defensa más frecuentes que emplea la gente, y los sicólogos modernos en ocasiones los reúnen en categorías que van desde lo “patológico” hasta lo “saludable”.
Pero aun las personas sanas emplean defensas sicológicas.
Además, Gurdjieff se refiere a los “amortiguadores” que sostienen al ego en su lugar, si bien seguramente se refería más a las fijaciones o bien hábitos mentales que se alinean con cada uno de ellos de los 9 estilos o bien a las pasiones -patrones de reactividad sensible- que se provocan cuando nuestros egos impulsan nuestras contestaciones.
Por deducción y por definición, los mecanismos de defensa son “amortiguadores psicológicos” que sostienen nuestros egos sicológicos en su lugar.
Por deducción, reducir el impacto de nuestros mecanismos de defensa reduce el control del ego sobre nosotros.